
Me llegué a emocionar (y yo iba de agüita) en el escenario mientras presentaba el espectáculo, al ver a tantísima gente. Porque con ellos, con el público se completaba el círculo, y todo el trabajo realizado tenía en ese momento sentido. Y lo mismo ocurrió con Maurizio y Pd Pollo, que nos hicieron disfrutar de una sesión de temas alicantinos irrepetible e inolvidable. Estuvisteis tremendos, muchachos. Yo nunca había visto el Pixies tan lleno. La gente estaba en la puerta porque 'no se puede ni respirar'. Supongo que eso es morir de éxito. Se me agota la palabra 'gracias' estos días. Ahora, a preparar Üalà Marzo, a seguir con el Observatorio Cultural y a preparar Festijam 2: Elche's History. Un no parar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario